Street View, la tecnología del servidor de aplicaciones de
mapas de Google, fue más allá de los mapas de las calles del mundo y estrenó
este viernes su primer mapeo tridimensional bajo el agua: el de la Gran Barrera
de Coral, en Australia.
La incursión de Google en el mundo submarino permite a los
usuarios zambullirse virtualmente en el mayor arrecife de coral del planeta y
recorrerlo como cuando uno busca una dirección.
Hasta ahora es posible conocer una gran parte de la Gran
Barrera, así como Bondi Beach y la bahía de Sídney.
Google se asoció con el equipo de investigadores
australianos Catlin Seaview Survey para crear la base de datos de la barrera,
declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1981.
Cámara especial
Richard Vevers, director ejecutivo de Catlin Seaview Survey,
declaró a la cadena de televisión australiana ABC que los investigadores
emplearon una cámara diseñada especialmente para recolectar miles de imágenes
del litoral del estado de Queensland, en el noreste de Australia.
"Nos permite tomar imágenes completas de 360 grados
cada tres segundos mientras viajamos por el arrecife", expresó.
"Los usuarios pueden zambullirse en el agua, bucear
virtualmente y apreciar las diferencias a lo largo de los 2.300
kilómetros", agregó.
Un instrumento para evaluar el calentamiento global
Esta tecnología abre el camino para mapear otros importantes
lugares bajo el mar.
Además de recorrerlos visualmente, servirá para documentar
los daños causados por un ciclón o para examinar los efectos del calentamiento
global.
Esto último es importante, considerando que la Gran Barrera
de Coral está en peligro.
Se trata de un hábitat de cientos de especies distintas
-1.800 en el caso de los peces- y algunas en riesgo de extinción, como el
dugongo (parecido al manatí) y la gran tortuga verde.
Las imágenes son accesibles a través de Google Maps y fueron
grabadas en decenas de locaciones en el arrecife.
Vevers afirmó también que el proyecto es extremadamente
importante para la ciencia, porque ha creado un registro de cómo luce.
"Lo que hemos reveado hoy es uno de los registros más
completos de la Gran Barrera de Coral que se han publicado", dijo.
"Se pueden usar como un expediente muy preciso para monitorear los cambios
ambientales en el arrecife".